En el presente artículo se abordará el tema de Prótesis, el cual ha sido objeto de interés y estudio por parte de diversas disciplinas a lo largo del tiempo. Prótesis ha ejercido una influencia significativa en diferentes aspectos de la sociedad, la cultura y la historia, dejando su huella en la vida de las personas y en el desarrollo de las comunidades. A través de un análisis detallado, se explorarán las distintas dimensiones y perspectivas que rodean a Prótesis, ofreciendo al lector una visión integral y enriquecedora sobre este tema tan relevante en la actualidad. Mediante la recopilación de investigaciones, testimonios y opiniones expertas, se pretende contribuir al conocimiento y comprensión de Prótesis, proporcionando al lector las herramientas necesarias para reflexionar y formar su propio juicio al respecto.
Una prótesis es una extensión artificial que reemplaza o provee una parte del cuerpo que falta por diversas razones.
Una prótesis corporal es la que reemplaza un miembro del cuerpo, cumpliendo casi la misma función que un miembro natural, sea una pierna, un brazo, un pie, una mano, o bien uno o varios dedos. Pero existen varios otros tipos de prótesis, algunas de las cuales reemplazan funciones perdidas del cuerpo, mientras que otras cumplen funciones estéticas.
Es habitual confundir un aparato ortopédico u ortesis con una prótesis, utilizando ambos términos indistintamente. Una ortesis no sustituye total ni parcialmente a un miembro, sino que reemplaza o mejora sus funciones.
Las prótesis mamarias de Poly Implant Prothèses (PIP) tienen un mayor número de roturas y de casos de inflamaciones locales. El director y fundador de la empresa PIP, Jean-Claude Mas, ha sido el principal responsable de la comercialización y distribución de este tipo de prótesis mamarias. En la composición de los implantes PIP se habrían utilizado componentes químicos para la industria, que incluyen materiales altamente tóxicos como los aceites de silicona, el baysilone o el rhodorsil, que se emplean como aditivos para carburantes y para la fabricación de tubos de caucho. La trascendencia de este suceso incide en que este tipo de componentes no han sido probados suficientemente, alarmando a más de 30 000 mujeres que las llevan en el mundo, y obligándolas a cambiar la prótesis.Debido a la especial fragilidad de las prótesis PIP y a la posible inflamación de los tejidos cuando el gel llega a hacer contacto con ellos, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios ha recomendado la explantación de las PIP, y el control médico a las personas que las lleven.